Lista para amar

Hace algo más de dos años, dejé una relación después de 4 años y medio con él, de las cuales la mitad, estuvimos conviviendo en un piso.

Desde entonces, me daba cuenta que tenía miedo a conocer a alguna otra persona, no por pasarlo mal ni sufrir... de hecho a día de hoy sé qué cosas no aceptaría de la otra persona bajo ningún concepto, por que sinceramente, hay cosas que te hacen perder el tiempo y esas cosas estarán ahí siempre.

Tenía miedo a perder mi libertad, por que queramos o no, creo que para hacer ciertas cosas contamos con la opinión del otro y a veces nos dejamos influenciar, aunque creo que no se puede hacer todo lo que nos da la real gana, ya que tener en consideración al otro, no está de más. 

Me encontraba "bien", hacía lo que quería, cuando quería, donde quería... y no es que haya estado reprimida en mi noviazgo, pero me sentía que era la ÚNICA dueña y señora de mi día a día, la única dueña ( y responsable) de mis decisiones, nadie iba a reprocharme por si hacia una cosa u otra.

Estaba muy rehacia y no tenía ningun interés en conocer a nadie,  a tener que compartirlo "todo" con alguien. Cuando alguno se me acercaba, notaba que me ponía tensa. Oir hablar de novios, relaciones, etc... me daba vertigo y decía pufff quita quita... la verdad que estaba muy agusto con mi soltería. Aunque una amiga de mi madre me decía que no me preocupara por que, aseguraba ella, que esa época se me iba a pasar y llegaría un momento en que volvería todo a la normalidad.

Hace poco fui consciente de que ese momento había llegado, me estaba dando cuenta que volvía a tener ganas de conocer a chicos y a alguien en especial, y hoy ya estoy preparada para amar y para que me amen. He de decir que no me asusta la idea, ni me llevo las manos a la cabeza diciendo "ay dios...." todo lo contrario, es una sensación muy buena, es como si ya estuviera curada y preparada para seguir. Pero quiero dejar claro que es algo que no me obsesiona, es decir, que si el destino no desea que tenga novio... pues no pasa nada! Hay mil maneras de disfrutar de la vida.